domingo, 31 de enero de 2016

Autoestima


!Estaré muy atenta!...


El temor del Señor es la sabiduría...


¿QUÉ SE SIENTE SER VIEJA?


El otro día, una persona joven me preguntó: -¿Qué sentía al ser vieja?-


Me sorprendió mucho la pregunta, ya que no me consideraba vieja. Cuando vio mi reacción, inmediatamente se apenó, pero le expliqué que era una pregunta interesante. Y después de reflexionar, concluí que hacerse viejo es un regalo.

A veces me sorprendo de la persona que vive en mi espejo. Pero no me preocupo por esas cosas mucho tiempo. Yo no cambiaría todo lo que tengo por una cana menos y un estomago plano. No me regaño por no hacer la cama, o por comer algunas "cositas" de más. Estoy en mi derecho de ser un poco desordenada, ser extravagante y pasar horas contemplando mis flores.

He visto algunos queridos amigos irse de este mundo, antes de haber disfrutado la libertad que viene con hacerse viejo.

-¿A quién le interesa si elijo leer o jugar en la computadora hasta las 4 de la mañana y después dormir hasta quien sabe qué hora?- 

Bailaré conmigo al ritmo de los 50's y 60's. Y si después deseo llorar por algún amor perdido ¡Lo haré!
Caminaré por la playa con un traje de baño que se estira sobre el cuerpo regordete y haré un clavado en las olas dejándome ir, a pesar de las miradas de compasión de las que usan bikini. Ellas también se harán viejas, si tienen suerte...

Es verdad que a través de los años mi corazón ha sufrido por la pérdida de un ser querido, por el dolor de un niño, o por ver morir una mascota. Pero es el sufrimiento lo que nos da fuerza y nos hace crecer. Un corazón que no se ha roto, es estéril y nunca sabrá de la felicidad de ser imperfecto. Me siento orgullosa por haber vivido lo suficiente como para que mis cabellos se vuelvan grises y por conservar la sonrisa de mi juventud, antes de que aparezcan los surcos profundos en mi cara.

Ahora bien, para responder la pregunta con sinceridad, puedo decir: -¡Me gusta ser vieja, porque la vejez me hace más sabia, más libre!

La felicidad...


No se puede conocer el amor...



Job 35


Job, 35

1.Elihú volvió a tomar la palabra y dijo:

2.¿Crees que has hablado con sensatez y que te has justificado ante Dios

3.al decirle: Qué te importa? No te alcanza mi pecado.

4.Voy a responderte a ti, y contigo a tus amigos.

5.Contempla los cielos y mira, observa cómo las nubes están más arriba que tú.

6.Si pecas, ¿qué le haces? Si se multiplican tus ofensas, ¿en qué lo perjudicas?

7.Y con ser justo, ¿qué le das o qué recibe él de tu mano?

8.A un hombre como tú afecta tu maldad, tu justicia es a la medida de los hombres.

9.Gritan bajo el peso de la opresión, y claman porque los poderosos los dominan,

10.pero no preguntan: «¿Dónde está Dios, que nos creó, que da en las noches cantares de júbilo,

11.que nos instruye por medio de las bestias y nos da ejemplos en las aves del cielo?»

12.Por eso, él no responde cuando gritan, cuando los malos los maltratan.

13.En vano claman: Dios no escucha, el Omnipotente no los atiende.

14.Peor todavía si dices que no encuentras a Dios, y que después de preparar tu defensa lo esperas.

15.Lo mismo si dices que su enojo no sabe castigar y que no se entera de los abusos.

16.Por tanto, Job habla para decir nada y multiplica sus discursos por falta de conocimiento.»

sábado, 30 de enero de 2016

Si no existieran fronteras...


Si para combatir al ...


Job 34


Job, 34

1.Elihú continuó hablando y dijo:

2.«Sabios y doctos, escuchen, presten atención a mis palabras.

3.Porque el oído aprecia las palabras como el paladar gusta los manjares.

4.Examinemos, pues, entre nosotros lo que es justo, reconozcamos lo que es bueno.

5.Job ha dicho: «Yo soy justo, pero Dios niega mi derecho

6.y miente en contra mía, mi llaga es incurable, a pesar de que no tengo culpa.»

7.Pero, ¿acaso hay alguien como Job que se burla tan fácilmente como bebe?

8.Ahora toma el partido de los malvados y camina con los hombres impíos.

9.Job ha dicho: «El hombre no saca provecho con estar en gracia de Dios.»

10.Por eso, ustedes que saben pensar, escúchenme: Lejos de Dios el mal, y del Omnipotente, la injusticia.

11.Porque él retribuye la obra del hombre y trata a cada uno según su conducta.

12.Ciertamente, Dios no hace el mal y el Omnipotente no tuerce el derecho.

13.¿Quién le confió la tierra, y le encargó el mundo entero?

14.Si llamara de vuelta a su sabiduría y recogiera su soplo y su espíritu,

15.en un instante moriría toda la tierra y los hombres volverían al polvo.

16.Si tienes inteligencia, escúchame y presta atención a mis palabras:

17.¿Acaso puede gobernar el que odia el derecho? ¿Cómo vas a condenar al Justo Supremo?

18.El puede decir a un rey: ¡Infame!, y a los príncipes: ¡Malvados!

19.No toma el partido de los príncipes ni distingue entre el rico y el pobre, porque todos son obra de sus manos.

20.Mueren de noche en un instante: se amotina un pueblo y derriba al tirano sin esfuerzo.

21.Pues sus ojos vigilan los caminos del hombre, y observan todos sus pasos,

22.no hay tinieblas ni sombras donde puedan esconderse los malvados,

23.Al hombre no le fija fecha para presentarse ante Dios:

24.derrota a los grandes sin averiguaciones y pone a otros en su lugar.

25.El, conocedor de sus obras, los derriba en una noche y quedan aplastados,

26.los abofetea como a malvados allí donde todos puedan verlos,

27.porque se apartaron de él y no tomaron en cuenta su voluntad

28.mientras hasta élsubía el grito de los débiles: él escuchaba el lamento de los pobres.

29.Si Dios calla, ¿quién lo moverá? Si esconde su rostro, ¿quién lo descubrirá? Vela sobre las naciones y los individuos,

30.y le quita el poder al opresor del pueblo.

31.Pero si éste dice a Dios: «Me dejé llevar, no volveré a hacer mal;

32.enséñame hasta que yo sepa bien; He cometido crímenes, pero no volveré a hacerlo»;

33.según tu parecer, ¿lo castigará Dios? Dilo, pues, tú que criticas, tú debes responder, no yo, di pues lo sabes.

34.Los hombres sensatos me dirán, al igual que todo sabio que me escuche:

35.Job habla sin saber, y sus argumentos no valen.

36.Más aún, Job debe ser examinado a fondo por sus respuestas, propias de malvados.

37.Job ahora peca con plena advertencia, ya que niega su falta entre nosotros y no cesa de hablar contra Dios.»

viernes, 29 de enero de 2016

!Mañana será otro día para hacer las cosas mejor que hoy!


La riqueza atrae amigos...


No hay necesidad de guerras...


Si fallaste ayer no importa...


Lo que otras personas piensen de ti, es su realidad...no la tuya


Pobres son los que...


Job 33


Job, 33


1.Escucha, Job, mis palabras, pon atención a mis discursos.

2.Ya ves que he abierto mi boca, y he empezado a hablar.

3.Mi corazón me dicta palabras de sabiduría que pronunciaré con claridad.

4.El espíritu de Dios me hizo, y el soplo del Omnipotente me dio vida.

5.Si puedes, respóndeme, prepárate para replicarme.

6.Mira, ante Dios soy igual que tú, también yo fui modelado de barro.

7.Por eso, no tendrás que atemorizarte ante mí. ni temerás que te apremie mi mano.

8.No dejas de repetir, pues he oído el son de tus palabras:

9.«Soy puro, no tengo pecado; estoy limpio y en mí no hay culpa.

10.Dios es el que busca pretextos y me tiene por su enemigo;

11.pone trabas a mis pies y vigila mis pasos.»

12.Te respondo: Estas quejas no valen, pues, ¡cuánto supera Dios al hombre!

13.¿Por qué le haces este reproche de que no contesta tus palabras?

14.Pero mira que Dios habla una vez y no lo repite dos veces.

15.En sueños, en visión nocturna, cuando desciende el sueño sobre los hombres, mientras los humanos duermen en su cama,

16.él les abre el entendimiento y los espanta con apariciones,

17.para retraerlos del mal y apartarlos del orgullo.

18.Así le ahorra la tumba a su alma y salva su vida de la muerte.

19.Ve cómo Dios instruye al hombre en su cama, por medio del dolor y de la fiebre,

20.cuando está hastiado del pan y rechaza los manjares apetitosos.

21.Cuando su carne desaparece a la vista y los huesos se transparentan,

22.cuando su alma se acerca al sepulcro y su vida a la morada de los muertos.

23.Si hay junto a él en ese momento un ángel de Dios, un intercesor que le indique su deber,

24.que tenga piedad de él y diga: «Líbralo, ¡oh Dios!, de bajar al sepulcro, aquí tengo lo que él debía pagar.»

25.Entonces, su carne rejuvenece como en los días de su adolescencia.

26.Se vuelve a Dios que le hace caso, lo va a visitar y estalla de alegría.

27.Luego publica lo sucedido y dice entre los hombres: «Había yo pecado y torcido el derecho, pero Dios no me ha tratado según mi culpa,

28.libró mi alma del sepulcro y vivo ahora gozando la luz.»

29.Esto es lo que hace Dios, dos y tres veces con el hombre,

30.para sacar su alma del sepulcro e iluminarla con la luz de los vivos.

31.Fíjate, Job, y escúchame, guarda silencio y yo hablaré.

32.Si tienes algo que decir, respóndeme, habla, que yo quiero darte la razón.

33.O si no, escúchame, cállate y yo te enseñaré la sabiduría.»

jueves, 28 de enero de 2016

!!SU NOCHE DE BODAS!! HUMOR



Una señora pidió a sus tres hijas que cuando se casaran la llamaran al día siguiente de la primera noche para contarle lo más disimuladamente posible sobre el desempeño sexual de sus maridos, utilizando el lema de algún anuncio comercial.

Después de su primera noche, la hija mayor la llamó y sólo le dijo:

NESCAFE.

La señora quedó confundida, hasta que más tarde vió un anuncio de NESCAFE que decía:
“SATISFACCIÓN HASTA LA ÚLTIMA GOTA”.

Tiempo después se casó su segunda hija, y a la mañana siguiente le llamó para decirle entre suspiros: COLCHONES ROSEN.

La mamá busco la publicidad de Colchones Rosen y leyó complacida:
“VIVE LA VIDA CON TU KING SIZE” (extra grande).
Por último se casó la hija menor, que sólo le llamó una semana después, y casi sin voz le susurró: AMERICAN AIRLINES.

La mamá buscó frenéticamente un anuncio de American Airlines, y antes de desmayarse leyó:
“4 VECES AL DIA, 7 DÍAS A LA SEMANA, LOS 365 DÍAS DEL AÑO, TODAS LAS RUTAS.”

!Mucho cuidado con juzgarme...!


Lo que más amarga al amargado...


No juzgues tu belleza...


A valorar


Si no soñaras...


Job 32



Job, 32

1.Y aquellos tres hombres dejaron de replicar a Job porque lo creían justo.

2.Entonces Elihú, hijo de Barakel, busita de la familia de Ram, se enojó contra Job, porque creía tener razón frente a Dios;

3.y también contra sus tres amigos, porque no habían encontrado qué responder y así habían dejado mal a Dios.

4.Elihú había esperado mientras hablaban con Job, porque ellos eran mayores que él.

5.Pero cuando vio que los tres hombres ya no respondían, se enojó.

6.Elihú tomó la palabra y dijo: «Yo soy joven y ustedes ancianos, y por eso temía y sentía miedo de manifestarles mi saber.

7.Yo me decía: hablará la edad y de los muchos años brotará la sabiduría.

8.Pero no; ella es en el mortal fruto de una inspiración, un espíritu salido del Omnipotente da la inteligencia.

9.Los sabios no son los ancianos, ni por ser viejos comprenden lo que es justo.

10.Por eso, ahora les digo: «Escúchenme y yo también demostraré mi saber.»

11.Yo puse atención a sus discursos y me fijé en sus razones mientras ustedes buscaban palabras.

12.Los escuché a ustedes atentamente, pero veo que nadie critica a Job, ninguno responde a sus razones.

13.No digan, pues: «Hemos alcanzado la sabiduría; es Dios quien nos enseña, no un hombre»

14.No ordenaré palabras como ésas, ni les replicaré en los términos que usaron ustedes.

15.Están vencidos, ya no saben qué responder y les faltan las palabras.

16.Yo esperé, pero ya no hablan, se callan a la vez sin haberlo rebatido.

17.Por eso, responderé yo y manifestaré también mi parecer.

18.Porque me siento lleno de palabras y me empuja un fuego interior.

19.Dentro de mí hay como un vino que fermenta, y que revienta los odres nuevos.

20.Hablaré para desahogarme, abriré mis labios y responderé.

21.No tomaré partido por nadie, a nadie adularé,

22.porque no sé adular, y si lo hiciera, mi Creador me echaría al viento.

miércoles, 27 de enero de 2016

La persona más influenciable...


EL ECO DE LA VIDA. REFLEXIÓN


EL ECO Y LA VIDA. REFLEXIÓN


Por una montaña iban un padre y su hijo caminando. De repente el niño se cae y al golpearse se lastima y grita: 
_ ¡¡Aaahhh!!
Para su sorpresa oye que de algún lugar de la montaña alguien le devuelve el mismo sonido: _”¡¡Aaahhh!!”
Sobresaltado observa a la lejanía con curiosidad y a todo pulmón grita: _ ¿Quién está ahí?... - y recibe por respuesta: _ “¿Quién está ahí?”
Enojado el niño con quien responde, grita nuevamente: 
_ ¡Cobarde, no te burles de mí!...
Y nuevamente recibe como respuesta lo mismo que había preguntado: _ “¡Cobarde, no te burles de mí!”... 
Preocupado mira a su padre y le pregunta: 
_ ¿Qué sucede papá? 
El padre, lo mira con ternura… y sonriendo le dice:
_ Hijo, presta atención… – Pone sus manos alrededor de la boca y le grita él a la montaña: 
_ ¡Te admiro!... 
Y casi al momento recibe por respuesta: _ “¡Te admiro!”... 
Grita de nuevo: 
_ ¡Eres un campeón!… 
Y la voz responde:… _ “¡Eres un campeón!”...
El niño no entendía lo que pasaba y el padre le explica: 
_ ¡A este fenómeno se le conoce como eco…y… aunque los científicos dicen que no es más que un fenómeno acústico producido cuando una onda sonora se emite y regresa a su emisor, yo digo que es más que eso… El Eco es como nuestra vida... Te lo devuelve todo,… nos devuelve todas nuestras acciones, si deseas más amor, crea amor a tu alrededor y amor tendrás, si deseas felicidad, da felicidad a los que te rodean y felicidad tendrás... 
Hizo un momento de silencio y mirando a los ojos de su hijo, termino diciendo:
-Hijo mío, ten siempre presente una cosa:… ¡La vida te da de regreso exactamente aquello que tú has dado!... Si no te gusta lo que recibes de vuelta, revisa muy bien lo que estás dando.

Moraleja:
¡Da Siempre A Los Demás, Lo Que Quisieras Recibir De Los Demás!
COMPARTE

Walter Riso. 1 Si no eres capaz...


El agua...


Cuando la mediocridad de los demás...


No eres Tú, soy Yo... ¿Quién te hace sufrir?




ESTO TE LLEVARÁ 3 MINUTOS LEER Y TE SERVIRA TODA LA VIDA!!

Este es un ensayo de Viktor Frankl,
neurólogo, psiquiatra, sobreviviente del holocausto y el
fundador de la disciplina;
que conocemos hoy como Logoterapia.

No eres Tú, soy Yo...
¿Quién te hace sufrir? ¿Quién te rompe el corazón? ¿Quién te lastima? ¿Quién te roba la felicidad o te quita la tranquilidad? ¿Quién controla tu vida?...
¿Tus padres? ¿Tu pareja? ¿Un antiguo amor? ¿Tu suegra? ¿Tu jefe?...

Podrías armar toda una lista de sospechosos o culpables. Probablemente sea lo más fácil. De hecho sólo es cuestión de pensar un poco e ir nombrando a todas aquellas personas que no te han dado lo que te mereces, te han tratado mal o simplemente se han ido de tu vida, dejándote un profundo dolor que hasta el día de hoy no entiendes.

Pero ¿sabes? No necesitas buscar nombres. La respuesta es más sencilla de lo que parece, y es que nadie te hace sufrir, te rompe el corazón, te daña o te quita la paz. Nadie tiene la capacidad al menos que tú le permitas, le abras la puerta y le entregues el control de tu vida.

Llegar a pensar con ese nivel de conciencia puede ser un gran reto, pero no es tan complicado como parece. Se vuelve mucho más sencillo cuando comprendemos que lo que está en juego es nuestra propia felicidad. Y definitivamente el peor lugar para colocarla es en la mente del otro, en sus pensamientos, comentarios o decisiones.

Cada día estoy más convencido de que el hombre sufre no por lo que le pasa, sino por lo que interpreta. Muchas veces sufrimos por tratar de darle respuesta a preguntas que taladran nuestra mente como: ¿Por qué no me llamó? ¿No piensa buscarme? ¿Por qué no me dijo lo que yo quería escuchar? ¿Por qué hizo lo que más me molesta? ¿Por qué se me quedó viendo feo? y muchas otras que por razones de espacio voy a omitir.

No se sufre por la acción de la otra persona, sino por lo que sentimos, pensamos e interpretamos de lo que hizo, por consecuencia directa de haberle dado el control a alguien ajeno a nosotros.

Si lo quisieras ver de forma más gráfica, es como si nos estuviéramos haciendo vudú voluntariamente, clavándonos las agujas cada vez que un tercero hace o deja de hacer algo que nos incomoda. Lo más curioso e injusto del asunto es que la gran mayoría de las personas que nos "lastimaron", siguen sus vidas como si nada hubiera pasado; algunas inclusive ni se llegan a enterar de todo el teatro que estás viviendo en tu mente.

Un claro ejemplo de la enorme dependencia que podemos llegar a tener con otra persona es cuando hace algunos años alguien me dijo:

"Necesito que Enrique me diga que me quiere aunque yo sepa que es mentira. Sólo quiero escucharlo de su boca y que me visite de vez en cuando aunque yo sé que tiene otra familia; te lo prometo que ya con eso puedo ser feliz y me conformo, pero si no lo hace... siento que me muero".

¡Wow! Yo me quedé de a cuatro ¿Realmente esa será la auténtica felicidad? ¿No será un martirio constante que alguien se la pase decidiendo nuestro estado de ánimo y bienestar? Querer obligar a otra persona a sentir lo que no siente... ¿no será un calvario voluntario para nosotros?

No podemos pasarnos la vida cediendo el poder a alguien más, porque terminamos dependiendo de elecciones de otros, convertidos en marionetas de sus pensamientos y acciones.

Las frases que normalmente se dicen los enamorados como: "Mi amor, me haces tan feliz", "Sin ti me muero", "No puedo pasar la vida sin ti", son completamente irreales y falsas. No porque esté en contra del amor, al contrario, me considero una persona bastante apasionada y romántica, sino porque realmente ninguna otra persona (hasta donde yo tengo entendido) tiene la capacidad de entrar en tu mente, modificar tus procesos bioquímicos y hacerte feliz o hacer que tu corazón deje de latir.

Definitivamente nadie puede decidir por nosotros. Nadie puede obligarnos a sentir o a hacer algo que no queremos, tenemos que vivir en libertad. No podemos estar donde no nos necesiten ni donde no quieran nuestra compañía. No podemos entregar el control de nuestra existencia, para que otros escriban nuestra historia. Tal vez tampoco podamos controlar lo que pasa, pero sí decidir cómo reaccionar e interpretar aquello que nos sucede.

La siguiente vez que pienses que alguien te lastima, te hace sufrir o controla tu vida, recuerda: No es él, no es ella...ERES TÚ quien lo permite y está en tus manos volver a recuperar el control.

"Al hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: La última de las libertades humanas-la elección de la actitud personal que debe adoptar frente al destino- para decidir su propio camino".

Nos envejece más la cobardía...


Job 31


Job, 31

1.Yo había hecho ese pacto con mis ojos de ni siquiera mirar a una doncella.

2.Pues, ¿cuál es la parte que Dios nos envía desde arriba y cómo devuelve el Omnipotente desde lo alto?

3.¿No es acaso la desgracia para el injusto y la prueba para los que actúan con maldad?

4.El sabe cuál ha sido mi conducta y conoce todos mis pasos.

5.Nunca he andado con mentiras ni me he afanado en engañar a los demás.

6.Que me pese Dios en la balanza de la justicia, y se dará cuenta de mi honradez.

7.Si mis pasos se apartaron del buen camino, si mi corazón corrió tras lo que veían mis ojos, si he manchado mis manos,

8.¡que otro coma lo que yo sembré, y sean arrancados mis retoños!

9.Si mi corazón se dejó seducir por mujer, si estuve acechando a la puerta de mi prójimo,

10.¡sea para otro mi mujer, y otros brazos la estrechen!

11.Pues hubiera sido una infamia, un crimen condenado por los jueces,

12.un fuego que devora hasta la perdición y que habría consumido mis cosechas.

13.Si he menospreciado el derecho de mi siervo, o de mi sierva, cuando se quejaron de mí,

14.¿qué podré hacer cuando Dios me juzgue?; y cuando me pida cuentas, ¿qué responderé?

15.Me formó a mí y a ellos en el seno materno, un mismo Dios nos formó en el vientre.

16.No les negué a los pobres lo que deseaban, ni a la viuda dejé aguardando en vano..

17.¿Acaso comí solo mi pedazo de pan, sin compartirlo con el huérfano?

18.Al contrario, desde la infancia lo traté como un padre y desde joven he protegido a la viuda.

19.No he visto a un necesitado sin vestido ni algún pobre desnudo

20.sin que en lo íntimo de su ser me bendijera porque del vellón de mis corderos se había calentado.

21.Si he alzado mi mano contra un huérfano porque pensaba que podía contar con los jueces,

22.que mi espalda se desprenda del cuello y que mi brazo se parta en el codo.

23.Porque temo los castigos de Dios y no podría resistir ante su majestad.

24.No he puesto en el oro mi confianza, ni he exclamado: «Tú eres mi apoyo.»

25.No me complací en la abundancia de mis bienes ni de lo mucho que habían adquirido mis manos.

26.¿Acaso, al ver el sol en su esplendor y la luna que radiante caminaba,

27.mi corazón se dejó seducir en secreto, y le mandé con mi mano un beso de mi boca?

28.También esto habría sido una falta criminal, porque habría renegado del Dios que está en lo alto.

29.¿Acaso me alegré de la mala suerte de mi enemigo y me sentí feliz por la desgracia que lo afectaba?

30.No he permitido que mi lengua pecara deseándole la muerte como una maldición.

31.Decían las gentes de mi casa: ¿Hay alguien que no se haya saciado en su mesa?

32.Tenía abierta mi puerta al caminante y el forastero pasaba la noche a la intemperie .

33.¿Acaso disimulé mis culpas como hace un cualquiera, ocultando el pecado en mi seno?

34.¿Acaso debí temer al rumor público hasta quedarme callado y encerrado en mi casa?

35.¡Quién me diera que se me escuchara! Ahí va mi firma: ¡que me responda el Omnipotente!

36.La acusación escrita por mi adversario, estoy listo para llevarla sobre mi espalda y me la ceñiré como una corona.

37.A él le daré cuenta del número de mis pasos y me acercaré a él como un príncipe. (40c) Aquí terminan las palabras de Job.

38.Si la tierra clamó contra mí y junto con ella lloraron sus surcos,

39.por haber yo comido sus frutos sin pagarlos o porque hice exhalar el alma a su dueño,

40.¡que en lugar de trigo broten espinas, y en lugar de cebada, hierba maloliente!»

martes, 26 de enero de 2016

Nadie puede tener...


El mundo no será destruido...


No eres lo que tienes, eres lo que das.


Khalil Gibran. La apariencia


NO ME DARÉ POR VENCIDO



EL EMPRESARIO Y EL PESCADOR. REFLEXIÓN


EL EMPRESARIO Y EL PESCADOR. REFLEXIÓN

En cierta ocasión un alto ejecutivo estaba paseando por una bonita playa vestido con sus bermudas (de marca), sus gafas de sol (también con marca muy visible), su polo (con mucha marca), su gorra (con marca destacada), su reloj (de marca y carísimo), su calzado deportivo (donde todo era marca), su móvil colgado de la cintura (el móvil con marca y la bolsa en la que colgaba, también) y su gomina en el pelo ( sin marca, pero tan abundante que uno podía adivinarla).

Eran las dos de la tarde cuando se encontró con un pescador que felizmente recogía sus redes llenas de pescado y amarraba su pequeña barca. El ejecutivo se le acercó.

- Disculpe, pero le he visto llegar con el barco y descargar el pescado… ¿No es muy temprano para volver de faenar?

El pescador le miró de reojo y, sonriendo mientras recogía sus redes, le dijo:

- ¿Temprano? ¿Por qué lo dices? De hecho yo ya he terminado mi jornada de trabajo y he pescado lo que necesito.

- ¿Ya ha terminado hoy de trabajar? ¿A las dos de la tarde? ¿Cómo es eso posible? – dijo incrédulo, el ejecutivo.

El pescador, sorprendido por la pregunta, le respondió:

-Mire, yo me levanto por la mañana a eso de las nueve, desayuno con mi mujer y mis hijos, luego les acompaño al colegio, y a eso de las diez me subo a mi barca, salgo a pescar, faeno durante cuatro horas y a las dos estoy de vuelta. Con lo que obtengo en esas cuatro horas tengo suficiente para que vivamos mi familia y yo, sin holguras, pero felizmente. Luego voy a casa, como tranquilamente, hago la siesta, voy a recoger a los niños al colegio con mi mujer, paseamos y conversamos con los amigos, volvemos a casa, cenamos y nos metemos en la cama, felices.

El ejecutivo intervino llevado por una irrefrenable necesidad de hacer de consultor del pescador:

-Verá, si me lo permite, le diré que está usted cometiendo una grave error en la gestión de su negocio y que el “costo de oportunidad” que está pagando es, sin duda, excesivamente alto; está usted renunciando a un pay-back impresionante. ¡Su ganancia podría ser mucho mayor! Y su “umbral de máxima competencia” seguro que está muy lejos de ser alcanzado.

El pescador se lo miraba con cara de circunstancias, mostrando una sonrisa socarrona y sin entender exactamente adónde quería llegar aquel hombre de treinta y pico años ni por qué de repente utilizaba palabras que no había oído en su vida. Y el ejecutivo siguió:

- Podría sacar muchísimo más rendimiento de su barco si trabajara más horas, por ejemplo, de ocho de la mañana a diez de la noche.

El pescador entonces se encogió de hombros y le dijo:

- Y eso, ¿para qué?

-¡¿Cómo que para qué?! ¡Obtendría por lo menos el triple de pescado! ¡¿O es que no ha oído hablar de las economías de escala, del rendimiento marginal creciente, de las curvas de productividad ascendentes?! En fin, quiero decir que con los ingresos obtenidos por tal cantidad de pescado, pronto, en menos de un año, podría comprar otro barco mucho más grande y contratar un patrón…

El pescador volvió a intervenir:

- ¿Otro barco? ¿Y para qué quiero otro barco y además un patrón?

- ¿Que para qué lo quiere? ¡¿No lo ve?! ¿No se da cuenta de que con la suma de los dos barcos y doce horas de pesca por barco podría comprar otros dos barcos más en un plazo de tiempo relativamente corto? ¡Quizá dentro de dos años ya tendría cuatro barcos, mucho más pescado cada día y mucho más dinero obtenido en las ventas de su pesca diaria!

Y el pescador volvió a preguntar:

- Pero todo eso, ¿para qué?

- ¡Hombre! ¡¿Pero está ciego o qué?! Porque entonces, en el plazo de unos veinte años y reinvirtiendo todo lo obtenido, tendría una flota de unos ochenta barcos, repito, ¡ochenta barcos! ¡Qué además serían diez veces más grandes que la barcucha que tiene actualmente!

Y de nuevo, riendo a carcajadas, el pescador volvió:

- ¿Y para qué quiero yo todo eso?

Y el ejecutivo, desconcertado por la pregunta y gesticulando exageradamente, le dijo:

- ¡Cómo se nota que usted no tiene visión empresarial ni estratégica ni nada de nada! ¿No se da cuenta de que con todos esos barcos tendría suficiente patrimonio y tranquilidad económica como para levantarse tranquilamente por la mañana a eso de las nueve, desayunar con su mujer e hijos, llevarlos al colegio, salir a pescar por placer a eso de las diez y sólo durante cuatro horas, volver a comer a casa, hacer la siesta,…?

El pescador respondió:

-¿Y acaso eso no es todo lo que tengo ahora?

“Los obstáculos no tienen por qué detenerte. Si corres y encuentras una pared, no retrocedas ni te rindas. Imagínate cómo treparla, atravesarla o convertirla en tu fortaleza. Y trabajar con ella ahí”
(Michael Jordan)

La única diferencia entre una...


Escapa de los que levantan banderas...


Job 30


Job, 30

1.Pero ahora se ríen de mí unos más jóvenes que yo y cuyos padres, para mí, no eran dignos ni de mezclarse con los perros de mi ganado.

2.¿Qué habría hecho con sus manos si no tenían la más mínima fuerza, debilitados como estaban por el hambre y la miseria,

3.Roían las raíces de la estepa, hijos de una tierra desolada y árida.

4.Recogían hierbas por los matorrales, su pan eran las raíces de retama.

5.Los expulsaban de la sociedad, y se gritaba tras ellos como tras un ladrón,

6.por lo que moraban en lo abrupto de los torrentes, en huecos de la tierra y de las rocas.

7.Rugían entre las zarzas, y se reunían bajo los espinos.

8.Hijos de ruines, hijos de desconocidos, los arrojaban del país.

9.Ahora, sin embargo, les sirvo de canción y soy objeto de sus burlas.

10.Se espantan al verme y se alejan y sin miramientos escupen a mi paso.

11.Desde el día en que me quebró y me humilló, yaa no se contuvieron en mi presencia.

12.A mi derecha se levantan acusadores, mis pies están atrapados en la red, se están abriendo caminos hacia mí.

13.Me cortaron la huyida, me asaltan, y no hay quien los detenga;

14.se han abierto paso, ¡aquí están! se inflitran bajo los escombros.h

15.Los terrores caen soobre mí, el viento se llevó mis esperanzas, mi bienestar se me fue como una nube.

16.Y ahora se va deshaciendo mi vida, los días de afflicción se han apoderado de mí.

17.De noche se me taladran los huesos y no descansan mis llagas.

18.Con gran fuerza agarra Dios mi manto, me aprieta el cuello de la túnica.

19.Me ha tirado en el fango, ya no soy más que polvo y ceniza.

20.Clamo a ti, y tú no me respondes; me presento, y no me haces caso.

21.Te has vuelto cruel conmigo, me persigues con toda la fuerza de tus manos.

22.Me llevas y me haces cabalgar sobre el viento, hasta que una tormenta me deshace en agua.

23.Bien sé que me conduces a la muerte, al lugar de reunión de todos los vivientes.

24.Sin embargo, contra el pobre no levantaba mi mano cuando en su angustia clamaba a mí.

25.¿No lloré con quien tuvo días duros? ¿No se entristeció mi corazón por el pobre?

26.Yo esperaba la dicha, y llegó la desgracia. Esperaba la luz, y vino la oscuridad.

27.Mis entrañas se agitan sin descanso, porque me vinieron al encuentro días de aflicción.

28.Tengo la piel quemada pero no por el sol, En la asamblea quise hablar, pero fue sólo un chillido

29.Me he hecho hermano de chacales, compañero de avestruces.

30.Mi piel se ha ennegrecido sobre mí, mis huesos se van consumiendo por la fiebre.

31.Tomé mi cítara para la lamentación y mi flauta se puso a tono con las lloronas.

lunes, 25 de enero de 2016

La preocupación no resuelve los problemas del mañana, pero sí te quita la felicidad hoy.




La preocupación no resuelve los problemas del mañana, pero sí te quita la felicidad hoy.
- Anónimo

Haz lo que puedas, con lo que tengas, donde estés.


Nunca juzgues a la persona cuyas cargas no has llevado


Píntame como soy ... Si no Pones las cicatrices, ni las arrugas .. No te pagare .


!Atentos!


EL MURO Y LA ARAÑA. REFLEXIÓN





EL MURO Y LA ARAÑA. REFLEXIÓN

Dicen que una vez un hombre era perseguido por varios malhechores que querían matarlo. El hombre ingresó a una cueva. Los malhechores empezaron a buscarlo por las cuevas anteriores a la que él se encontraba. Con tal desesperación elevó una plegaria a Dios, de la siguiente manera:

-Dios todopoderoso, haz que dos ángeles bajen y tapen la entrada, para que no entren a matarme.

En ese momento escuchó a los hombres acercándose a la cueva en la que estaba escondido, y vio que apareció una arañita. La arañita empezó a tejer una telaraña en la entrada.

-Señor, te pedí ángeles, no una araña.

Y continuó:

-Señor por favor, con tu mano poderosa coloca un muro fuerte en la entrada para que los hombres no puedan entrar a matarme.

Abrió los ojos esperando ver el muro tapando la entrada, y observó a la arañita tejiendo la telaraña.

Estaban ya los malhechores ingresando en la cueva anterior y éste quedó esperando su muerte.

Cuando los malhechores estuvieron frente a la cueva que se encontraba el hombre, ya la arañita había tapado toda la entrada, entonces se escuchó esta conversación:

-¡Vamos, entremos a esta cueva!

-No. ¡No ves que hasta hay telarañas!, nadie ha entrado en esta cueva. Sigamos buscando en las demás.

“Si le pides a Dios un árbol te lo dará en forma de semilla.”

Si somos felices...


Job 29


Job, 29


1.Job prosiguió su poema y dijo:

2.«¡Quién me hiciera volver a los meses de antaño, a los días en que Dios me protegía,

3.cuando hacía brillar su lámpara sobre mi cabeza, y su luz me guiaba en las tinieblas!

4.¡Ah, si pudiesen volver los días de mi otoño, cuando rodeaba Dios mi tienda,

5.cuando el Todopoderoso estaba aún conmigo y me rodeaban mis hijos,

6.cuando mis pies se bañaban en leche y corrían de la roca arroyos de aceite!

7.Si yo salía a la puerta que domina la ciudad y me sentaba en la plaza,

8.los jóvenes al verme se retiraban y los ancianos se ponían de pie,

9.los notables interrumpían su conversación y ponían la mano en su boca.

10.La voz de los jefes se apagaba, la lengua se les pegaba al paladar.

11.Todo el que me oía me llamaba dichoso y quien me veía se declaraba en mi favor.

12.Pues yo libraba al pobre que gemía y al huérfano que no tenía apoyo,

13.la bendición del desgraciado caía sobre mí, y yo alegraba el corazón de la viuda.

14.Me había puesto la justicia como un vestido y llevaba mi rectitud como un manto y un turbante.

15.Era yo los ojos para el ciego, y los pies para el cojo.

16.Era el padre de los pobres, y me preocupaba por la causa del desconocido.

17.Quebraba los colmillos del malvado, de entre sus dientes arrancaba su presa.

18.Y me decía: «Anciano moriré, mis días serán tantos como los granos de arena.

19.Mi raíz se alarga hacia las aguas el rocío cae de noche en mi ramaje.

20.Mi gloria estará siempre flamante y en mi mano mi arco será fuerte».

21.Me escuchaban en silencio y esperando mi parecer.

22.Después que había hablado, nadie replicaba.

23.Caía sobre ellos mi discurso gota a gota: era la lluvia que aguardaban, el aguacero primaveral que camaría su sed.

24.Si les sonreía, no se atrevían a creerlo, y recibían gratos cualquier señal de benevolencia.

25.Les trazaba el camino e iba al frente de ellos como un rey en medio de sus tropas, y yo a mi gusto los llevaba a todas partes.